¿Google como embajador de Internet?
Muy buena columna de Jeff Jarvis en The Guardian “Google is defending citizens of the net” sobre la decisión adoptada por Google respecto a su diferendo con el gobierno chino, del cual hicimos alguna mención. Sin conocer, como se dice, el revés de la trama, creo que el razonamiento de Jarvis es coherente y la decisión no pasa por el negocio en China, sino como una difícil decisión que altera el equilbrio en el marco de actuación corporativo. Está más que claro que el ethos de la red es la apertura, el flujo abierto de un punto hacia el otro. Así creció, se expandió y nos ofrece hoy innumerables ventajas para aprovecharlas.
Tal como dice la célebre frase de John Gilmore,
The internet interprets censorship as damage and routes around it.
Para hacer un paralelismo muy poco elegante pero ilustrativo, podríamos decir por ejemplo que el ethos de una compañía tabacalera es el placer, entregarlo a sus consumidores mediante el uso de su producto, el tabaco. Su experiencia es el placer. ¿Sería una decisión sabia, como compañía, estar en contra de los placeres (o al menos de algunos)? Por supuesto que no.
La sociedad de internautas está cada vez más comprometida, o con un nivel de awarenesso conciencia cada vez más alta hacia la apertura, las posibilidades, el control de sus aplicaciones, datos, derechos, libertades digitales. ¿Sería entonces, acaso una decisión sabia de parte de Google, colocarse en contra de su propio ethos, ayudando a un régimen autoritario a cerrar o intervenir en parte la red? Por supuesto que no. Creo que allí se encuentra, utilizando de manera burda un término filosófico, la raíz de la cuestión.
No obstante, las críticas y los enfoques centrados en el negocio presentan también interesantes argumentos. También tienen sus aristas los argumentos sobre el desamparo de las capas medias e intelectuales chinos, que lamentarán la ausencia del soft-power de la compañía ante el gobierno.